Seguro que en más de una ocasión te ha ocurrido que uno de tus clientes ha manipulado su CPE, viéndote obligado a desplazar personal a su domicilio para restablecer la configuración del mismo a los valores correctos. En ese momento, es muy probable que hayas pensado si no existe alguna solución con la que poder ahorrarte este tedioso proceso. Pues bien, existe y se basa en el estándar TR-069.
El Technical Report 069 (TR-069) pertenece al Broadband Forum, también conocido como CPE WAN Management Protocol (CWMP). Su operatividad principal es que se encarga de definir un protocolo con el que poder gestionar CPEs remotamente.
Gracias a la existencia de este protocolo, un servidor ACS puede definir diferentes automatismos para poder configurar CPEs de forma automática. Dicha funcionalidad es el principal beneficio que te podrá ofrecer un servidor de aprovisionamiento ACS.
A su vez, un servidor ACS también te permitirá modificar parámetros desde la comodidad de tu oficina, sin necesidad de desplazamientos. Podrás llevarlo a cabo en todos los equipos que soporten TR-069, tales como: routers, ATAs e incluso algunos set-top-boxes.
Otro escenario en el que un servidor ACS es sumamente útil es en despliegues masivos o con mano de obra externa, donde necesitas que tus CPEs se configuren de forma automática, evitándote así tener que traspasar la responsabilidad de efectuar la configuración de los mismos a terceras personas.
Esto se acentúa aún más si las instalaciones se realizan bajo la modalidad de bitStream, la cual brindan varios operadores nacionales. El servicio BITSTREAM ofrece acceso indirecto sobre la red de fibra óptica GPON de varios operadores nacionales, en la que se ofrece conectividad de nivel 2 de forma segura y transparente. Esto se lleva a cabo desde el punto de interconexión con el cliente hasta el equipo terminal de red ONT (Optical Network Termination) en el domicilio del abonado.
Gracias a esta modalidad podrás tener equipamiento de cliente repartido a lo largo y ancho del país. Debes tener en cuenta que el coste que supondría mantener de forma presencial tal extensión de terreno, sería completamente inviable para una empresa de pequeño tamaño. Aunque, si tu empresa es pequeña, puedes utilizar un ACS. De esta manera, lo que podría considerarse como un proyecto inviable, puede convertirse en una realidad palpable.
Además, con un servidor ACS podrás tener un mecanismo de control de versiones de firmware de los CPEs instalados en casa de tus clientes, pudiendo efectuar actualizaciones de los mismos de forma masiva. Gracias a ello, ante un problema de seguridad, el tiempo de reacción y resolución de vulnerabilidades será considerablemente más rápido, derivando en conformar una red más robusta y, por tanto, más preparada para hacer frente a las continuas adversidades a las que está expuesto diariamente un operador de telecomunicaciones en lo relativo a la seguridad.
La mayoría de los ACS como, por ejemplo, GenieACS, disponen de una API con la que poder integrarlos con diferentes software de gestión y/o herramientas internas, con el fin de ofrecer una interfaz de usuario más amigable o ajustar el funcionamiento a tus necesidades.
De los múltiples escenarios posibles, el más favorable para que la instalación de un servidor ACS cubra muchas de las carencias inherentes a tener que gestionar CPEs, es el escenario donde el ISP disponga de una red de fibra óptica, ya sea propia o en modalidad de bitStream.
En Bandalibre acumulamos una dilatada experiencia en este escenario, y podemos implementar servidores ACS con la garantía de poder gestionar miles de dispositivos CPE de forma simultánea. Nuestro equipo está compuesto por técnicos altamente cualificados y en formación continua, que trabajan con más de 50 redes de operadores ISP, WISP o FTTH a diario. En ellas, llevan a cabo tareas complejas de gestión de redes de telecomunicaciones (mantenimiento, actualizaciones, configuración de equipos y nuevas implementaciones de servicios e instalación).