Cualquier proyecto comienza con una idea de negocio y, en la gran mayoría de los casos, no saber por dónde empezar suele ser lo normal, por lo que contar con expertos en la materia que te guíen a estructurar dicha idea es una buena opción a tener en cuenta.
En este caso, si estás interesado en emprender un negocio dentro del sector de las telecomunicaciones y, además, no te gustaría invertir demasiado en ello, deberías contratar un servicio de consultoría que te ayude a planificar el proyecto y a gestionar los problemas comunes del día a día. Es la mejor alternativa, no solo por lo indicado anteriormente, sino también porque de esta forma te asegurarás de cubrir todas las áreas desde un principio.
Es posible ofrecer servicios de Internet sin tener que invertir mucho capital, esto se debe a la cantidad de empresas que están dispuestas a poner a tu disposición sus servicios de telecomunicaciones para que te puedas convertir en operador en acceso indirecto. De esta forma, podrás crear tu cartera de clientes sin invertir en el desarrollo de tu propia red. Pero antes de elegir con quién trabajar, es importante que te asegures de que tu proveedor cumple con los principales requisitos para convertirse en tu mejor partner para vender servicios de telecomunicaciones.
Además, con un servicio de consultoría completo, no solo serás capaz de encontrar aquella empresa que mejor se adapte a tus necesidades, sino que, además, tendrás la posibilidad de abarcar las diferentes áreas de tu negocio con la garantía de tener un equipo especializado a tu lado.
A continuación, vamos a explicar qué áreas son indispensables cuando contratamos un buen servicio de consultoría externo:
En primer lugar, nos encontramos con el área legal-administrativa. Se trata de uno de los factores más importantes y prioritarios a la hora de empezar a constituir tu empresa, puesto que el sector de las telecomunicaciones se encuentra regulado por la CNMC, además de por otros organismos. Es necesario llevar a cabo una serie de trámites obligatorios en la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia para poder desarrollar tu actividad como operador de una manera legal. Además, no solo se trata de cubrir aquellas consultas relacionadas directamente con el sector, sino también las correspondientes a la creación de una empresa, prevención de riesgos laborales o incluso qué cursos son obligatorios para los trabajadores de tu entidad.
De la misma manera, cuando comiences a recorrer tu camino como operador, incluirás en tu negocio diferentes plataformas, herramientas, servidores, etc., y muchas veces, no saber cómo utilizarlos o cómo solucionar determinadas incidencias con los mismos se vuelve algo tedioso.
En segundo lugar, el área técnica-operaciones es aquella que se encarga de gestionar todas las incidencias a nivel técnico y de llevar a cabo transacciones que tienen lugar tanto al comienzo como durante la vida de tu empresa.
Por otra parte, cuando comienzas distribuyendo los servicios de otro operador, es importante que sepas elegir entre los diferentes proveedores mayoristas existentes, que te ofrecerán internet, telefonía móvil, telefonía fija o incluso televisión, así como deberás escoger los procedimientos a seguir para gestionar a tus clientes.
En último lugar, el área comercial-marketing conforma un departamento fundamental para saber cómo darte a conocer entre tu público objetivo, utilizando diferentes herramientas y plataformas que te ayudarán a dar el salto al canal digital. Además, al comenzar una actividad distinta como operador, necesitarás saber qué estrategias puedes llevar a cabo para vender un nuevo servicio y cómo hacer que tus clientes potenciales te asocien con el sector de las telecomunicaciones. Para ello, es importante contar con el respaldo de una empresa especializada en la temática que te brinde dicha capacitación y te asesore en cuestiones tales como: qué necesitas para tener tu propio ISP, en el estudio de competidores, creación de tarifas y planes de descuento, etc.
En conclusión, todos estos temas estarán presentes a lo largo del desarrollo de tu negocio, es por ello que se recomienda mantener el servicio de consultoría hasta alcanzar una cierta experiencia y formación que te permitan superar las diferentes dificultades existentes, así como ser capaz de tomar las mejores decisiones para tu empresa.
En este sentido, puede decirse que si lo que quieres es emprender en el sector de las telecomunicaciones sin tener que realizar una gran inversión, un servicio de consultoría puede ser de gran utilidad. Gracias a él, estarás acompañado durante todo el crecimiento del negocio, especialmente en los primeros años donde la incertidumbre es mayor y las dudas asaltan con asiduidad.
Por ello, este acompañamiento continuo te ayudará a disipar la incertidumbre lógica del comienzo y a tomar decisiones acertadas que conduzcan al éxito de tu empresa.